**CURLY HOWARD: El Triste Final del Chiflado Más Querido de (Los Tres Chiflados)**
En un giro desgarrador, la vida de Curly Howard, el ícono cómico de “Los Tres Chiflados”, llega a un trágico desenlace. Nacido como Jerome Horwitz el 22 de octubre de 1903 en Nueva York, Curly fue el menor de cinco hermanos en una familia judía lituana que luchaba por salir adelante. Desde su infancia, se destacó en el deporte y la comedia, pero sus sueños se vieron truncados por un accidente que le dejó una cojera permanente.
A pesar de su éxito en el escenario y la pantalla, su vida personal fue una lucha constante. Tras una serie de matrimonios fallidos y un creciente problema con el alcohol, su salud se deterioró drásticamente. En 1945, sufrió un derrame cerebral que marcó el inicio de un declive implacable. Su lucha con la hipertensión y el abuso de sustancias lo llevaron al aislamiento, confinado a una silla de ruedas y alejado de los escenarios que lo consagraron.
En sus últimos años, Curly fue ingresado en un sanatorio donde su salud mental se deterioró aún más, sufriendo episodios de confusión y tristeza. El 18 de enero de 1952, a la temprana edad de 48 años, Curly Howard falleció, dejando un vacío en el mundo del entretenimiento. Su funeral judío fue un homenaje a un hombre que, a pesar de su trágico fin, dejó un legado imborrable en la comedia.
Hoy, millones de fans lloran su partida, recordando su capacidad única para hacer reír. Su influencia se siente aún en los comediantes contemporáneos, y su legado como uno de los grandes del cine y la televisión perdura. Curly Howard, el chiflado más querido, no solo hizo reír a generaciones, sino que también dejó una huella profunda en la historia de la comedia.