El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha comparecido de urgencia para anunciar un acuerdo crucial con la OTAN en medio de una escalada de tensiones globales, tras el reciente ataque de Estados Unidos a Irán. En un discurso cargado de urgencia, Sánchez destacó que este acuerdo es vital para garantizar la unidad de la alianza atlántica sin necesidad de aumentar el gasto en defensa al 5% del PIB, una medida que muchos países están considerando.
La situación internacional es alarmante, con el imperialismo de Rusia y el aumento de amenazas híbridas que han transformado la vecindad europea en un escenario más inestable. La crisis en Irán, en particular, representa un riesgo significativo que podría desestabilizar al mundo entero. Sánchez subrayó la necesidad de que España adapte su estrategia y modernice sus capacidades para hacer frente a estas amenazas, reforzando sus alianzas y aumentando su inversión en seguridad y defensa.
Desde 2018, el Gobierno ha duplicado su inversión en defensa y ha incrementado los efectivos de las fuerzas de seguridad. España se ha posicionado como un actor clave en la arquitectura de seguridad de la OTAN y la Unión Europea. Sin embargo, el presidente enfatizó que el compromiso de gastar el 5% del PIB en defensa es desproporcionado e incompatible con el estado del bienestar del país.
El acuerdo alcanzado permite a España cumplir con sus obligaciones en la OTAN sin comprometer su economía ni su bienestar social. Sánchez aseguró que la soberanía de España se mantiene intacta y que la participación del país en la OTAN sigue siendo fuerte y legítima. En un momento en que el mundo se enfrenta a un abismo de conflictos, el mensaje es claro: España opta por la paz, la cooperación y el multilateralismo, defendiendo la dignidad y los derechos humanos en lugar de la guerra.