**ATAQUE DE FURIA DEL EX DE JULIETA PRANDI CON SU ABOGADO CUANDO SE CONOCIO Q IRIA PRESO: MOMENTO TENSO**
Un estallido de caos y tensión sacudió la sala del tribunal en el momento en que Claudio Contardi, condenado a 19 años de prisión por abuso agravado, decidió despedir a su abogado en pleno juicio. La escena, digna de un thriller judicial, dejó a todos los presentes sin aliento. La condena, leída en voz alta, fue un golpe devastador y el silencio se transformó en gritos de furia.
La mañana del 13 de agosto comenzó con la expectativa de un veredicto en uno de los casos más impactantes de violencia de género. Mientras Julieta Prandy, la denunciante, llegaba tarde, Contardi se sentó en silencio, pero todo cambió cuando el juez pronunció la sentencia. Testigos afirman que, tras escuchar el fallo, Contardi comenzó a murmurar tensamente con su defensor, Claudio Nitzcanner. La discusión escaló rápidamente, culminando en una ruptura abrupta que dejó a Nitzcanner furioso y abandonando la sala.
“¿Dónde pasará la noche?”, fue la inquietante pregunta que quedó en el aire cuando el abogado, visiblemente molesto, afirmó no tener idea de lo que ocurriría con su excliente. La situación se tornó surrealista: un hombre enfrentando casi dos décadas tras las rejas, sin defensa, en el momento más crítico de su vida.
La reacción de Contardi, lejos de ser de arrepentimiento, fue un grito desesperado que resonó en los pasillos del tribunal. Mientras tanto, Julieta Prandy, quien había denunciado a su expareja, llegó justo después del escándalo, con su exesposado y el abogado del otro lado de la puerta, generando un clima de tensión palpable.
Este inesperado giro de los acontecimientos plantea serias interrogantes sobre la estrategia legal de Contardi. ¿Fue un acto de desesperación o una táctica para deslegitimar el juicio? Lo cierto es que la condena por abuso 𝑠e𝑥ual con acceso carnal ha dejado a Contardi no solo esposado, sino también solo, en un momento que marcará su vida para siempre.