¡ESCÁNDALO EN COLOMBIA! En un giro impactante de los acontecimientos, Ángela Benedetti, hermana del ministro Armando Benedetti, ha lanzado acusaciones explosivas en vivo, señalando al presidente Gustavo Petro como responsable de la muerte del senador Miguel Uribe Turbay. Las declaraciones, que han incendiado las redes sociales, surgieron tras el conmovedor funeral del senador, donde miles de asistentes clamaron: “¡Petro lo mató!”, desatando una ola de indignación y debate político.
Durante una transmisión en sus redes, Benedetti advirtió que el equipo legal del presidente enfrentará un arduo trabajo si decide demandar a quienes lo acusan. “Van a necesitar un ejército de abogados para demandar a medio país”, expresó, reflejando la creciente frustración de una nación que exige respuestas. En medio de este clima tenso, el mandatario Petro ha prometido presentar denuncias formales ante la Corte Suprema contra quienes lo vinculen con el crimen, defendiendo su honor y afirmando que no hay pruebas que lo incriminen.
La situación ha escalado rápidamente, con figuras públicas como la periodista Vicky Dávila y el excandidato presidencial Enrique Gómez cuestionando la retórica de Petro, sugiriendo que sus propias palabras han contribuido a un clima de violencia. “Demandará a millones de colombianos. Usted es el responsable político de lo que le pasó a Miguel Uribe”, advirtió Dávila, mientras Gómez instó al presidente a aclarar sus controvertidas declaraciones sobre la oposición.
Este escándalo no solo pone en jaque la estabilidad del gobierno, sino que también revela la profunda polarización que atraviesa a Colombia. Con la sociedad dividida y clamando por justicia, las acusaciones de Benedetti y las respuestas de Petro abren un debate crucial sobre la necesidad de un diálogo nacional. La pregunta que resuena en el aire es: ¿podrá el país encontrar un camino hacia la unidad en medio de esta tormenta política? La tensión está en su punto máximo y el futuro de Colombia pende de un hilo.