¡ALERTA MUNDIAL! China ha lanzado un contundente mensaje a Estados Unidos, desafiando su reciente despliegue militar en el Caribe, cerca de las costas de Venezuela. En una declaración sin precedentes, la portavoz de la cancillería china, Ma Ning, ha dejado claro que la amenaza o el uso de la fuerza no serán tolerados. Este pronunciamiento se produce en un contexto alarmante: tres buques de guerra estadounidenses, con aproximadamente 4,000 soldados a bordo, están posicionados en aguas caribeñas, mientras la Casa Blanca, a través de su portavoz Caroline Libert, asegura que Donald Trump está listo para actuar con todo el poder disponible.
La tensión en la región ha alcanzado niveles críticos. Los países miembros de la Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América (ALBA) han convocado a la unidad frente a lo que consideran una agresión militar inaceptable. Este despliegue estadounidense no solo amenaza la paz en Venezuela, sino que también pone en peligro la estabilidad de toda América Latina.
Desde Pekín, Ma Ning ha reafirmado el compromiso de China con la soberanía de las naciones y ha instado a Washington a contribuir a la paz en lugar de intensificar las hostilidades. “La región no necesita guerras de nervios ni desplantes navales”, afirmó, subrayando que el derecho internacional no admite atajos.
Mientras tanto, Irán también ha elevado su voz en el ámbito multilateral, pidiendo al Consejo de Seguridad de la ONU que preste atención a esta situación potencialmente peligrosa. La comunidad internacional observa con preocupación cómo las tensiones se agravan, y el riesgo de un conflicto se cierne sobre el Caribe.
Con la historia de intervenciones en América Latina aún fresca en la memoria, el llamado a la paz se hace más urgente. La respuesta de China y otros países es clara: no permitirán que el Caribe se convierta en un campo de batalla de potencias externas. La estabilidad de la región depende de la cooperación y el respeto mutuo, no de la militarización. ¡El mundo está mirando!