Tragedia familiar: Tiago Medina, en coma inducido tras un grave accidente, lucha por su vida. Sus hermanos, Lucas y Sergio, expresan su angustia y esperanza en medio de la adversidad.
En un dramático giro de los acontecimientos, Tiago Medina, conocido por su bondad y cercanía familiar, se encuentra en estado crítico tras un accidente de moto. Sus hermanos han compartido la difícil situación que atraviesan, destacando que Tiago está estable pero en coma inducido. La familia se mantiene unida, orando por su recuperación mientras esperan los resultados de los cultivos médicos para determinar la causa de su fiebre.
Lucas, el hermano menor, describe a Tiago como un “orgullo” y un “corazón puro”, resaltando su carácter bondadoso. La familia, compuesta por diez miembros, se turna para estar a su lado en el hospital, respetando el espacio de otros pacientes. La necesidad de donantes de sangre es urgente; se solicita a la comunidad que colabore en el hospital de Moreno, donde se están utilizando reservas para el tratamiento de Tiago.
Los hermanos revelan que, a pesar del dolor, se esfuerzan por mantener la fortaleza y la esperanza. “Lo único que pido son oraciones”, dice Sergio, mientras Lucas recuerda la alegría y la cercanía que siempre compartieron con su hermano. La situación es delicada, y el apoyo de la comunidad es crucial en este momento crítico.
Tiago, que siempre estuvo pendiente de su familia, ahora enfrenta una dura batalla por su vida. La familia Medina clama por ayuda y oraciones, esperando que el amor y la fe les ayuden a superar esta tormenta. La historia de Tiago es un recordatorio desgarrador de la fragilidad de la vida y la importancia de la unidad familiar en tiempos de crisis.
