El futuro de Harry y Meghan pende de un hilo tras una asombrosa propuesta en la Cámara de los Lores que podría despojar al príncipe de su título de duque de Sus𝑠e𝑥. En una moción impulsada por el respetado Lord Goldsmith, se busca aplicar la ley de privación de títulos de 1917, una medida drástica que no se veía desde hace un siglo. La razón: los continuos ataques públicos de Harry contra la familia real, desde explosivas entrevistas hasta un libro revelador que ha sacudido los cimientos de la monarquía.
La propuesta ha encontrado eco en el descontento popular, con encuestas que indican que más del 60% de los británicos respaldan la idea de que Harry y Meghan pierdan sus títulos. Este clamor no es solo de una élite ofendida; es un grito de una nación cansada de las contradicciones de una pareja que critica la monarquía mientras se beneficia de sus privilegios.
Lord Goldsmith argumenta que Harry ha traicionado los valores que su título representa, y la historia de la monarquía británica respalda la gravedad de esta moción. Mientras tanto, el silencio de Buckingham Palace es ensordecedor, y tanto el rey Carlos como el príncipe Guillermo observan con atención los acontecimientos. Las tensiones familiares han llegado a un punto crítico, con Guillermo considerando a Harry un obstáculo para modernizar la institución.
La pérdida del título no solo sería una humillación pública; tendría repercusiones financieras devastadoras para la marca Sus𝑠e𝑥 Royal. Sin el estatus real, Harry y Meghan podrían perder contratos multimillonarios y enfrentar interrogantes sobre su estatus migratorio en Estados Unidos. La presión aumenta y el tiempo corre. ¿Es este el final del sueño real de Harry y Meghan? La Cámara de los Lores se prepara para debatir una decisión que podría cambiar el rumbo de la historia moderna de la monarquía británica.