¡ÚLTIMA HORA! Las autoridades de Nebraska han denunciado REDADAS MASIVAS de ICE que han dejado a cientos de familias en estado de shock y desesperación. En Omaha, el alcalde J. Juén ha expresado su profunda preocupación por el impacto devastador que estas operaciones han tenido en la comunidad inmigrante. “Estamos aquí para apoyar a las familias afectadas”, afirmó, destacando la activación de equipos de respuesta rápida por parte de diversas organizaciones locales que ofrecen asistencia legal y humanitaria.
La policía de Omaha, por su parte, aclaró que su papel en la operación fue limitado a controlar el tráfico y garantizar la seguridad, sin involucrarse en las detenciones. Sin embargo, la tensión en la comunidad es palpable, con protestas pacíficas que han estallado en respuesta a las redadas. “No sabemos cuántas familias han sido separadas, pero el temor es real”, dijo el jefe de policía, quien subrayó la necesidad de mantener la paz y proteger los derechos de los manifestantes.
Las organizaciones comunitarias están trabajando incansablemente para brindar apoyo a quienes han perdido a sus seres queridos en estas redadas. “El impacto es traumático”, señaló un portavoz, mientras que otros líderes comunitarios instan a la población a mantenerse unida y a informarse sobre sus derechos. Con más de 80 familias afectadas y muchas preguntas sin respuesta, la comunidad de Omaha se enfrenta a un momento crítico.
Se han establecido líneas de asistencia y recursos legales para aquellos que necesitan ayuda. La incertidumbre persiste, y la preocupación por futuras redadas continúa creciendo. Las autoridades locales hacen un llamado a la calma y a la cooperación, mientras la comunidad busca recuperar su sentido de seguridad y dignidad. Este es un momento decisivo para Omaha y su población inmigrante, que necesita apoyo y solidaridad más que nunca.