Rachel Zegler, la joven estrella de 23 años, se desplomó en su camerino tras recibir la devastadora noticia de que el remake de “Blancanieves” había sido cancelado por Disney+. En un momento que prometía ser el más brillante de su carrera, Zegler, quien había sido aclamada como la nueva princesa de Disney, se encontró en medio de una crisis emocional, hiperventilando y llorando desconsoladamente. Fuentes revelan que, justo antes de su colapso, un ejecutivo de Disney la informó en una fría llamada que la película, con un presupuesto de 270 millones de dólares, había sido borrada de la programación sin previo aviso.
La presión había sido abrumadora para Zegler, quien había enfrentado críticas feroces y un acoso incesante en redes sociales desde que fue elegida para el papel. Sus comentarios sobre el clásico de 1937, que muchos consideraron una ofensa al legado de Disney, la convirtieron en un blanco de ataques. La controversia se intensificó aún más cuando hizo un polémico comentario político que dividió a los fans y llevó a Disney a actuar con rapidez para mitigar el daño.
Mientras los reporteros esperaban su aparición, Zegler se encontraba acurrucada en un rincón, repitiendo “lo retiraron, lo retiraron todo”. El caos en el camerino fue tal que el equipo de relaciones públicas tuvo que intervenir, y la seguridad del evento se vio obligada a despejar el área. A pesar de los intentos de calmarla, la situación se tornó crítica, y un miembro del personal médico tuvo que estabilizarla.
Este colapso no solo marca un punto bajo en la carrera de Zegler, sino que también pone de relieve las crueles realidades de Hollywood, donde una estrella puede caer en desgracia casi de la noche a la mañana. Mientras la industria se apresura a buscar una nueva cara para “Blancanieves”, la pregunta persiste: ¿podrá Rachel Zegler recuperarse de esta tormenta que amenaza con borrar su nombre del mapa de Hollywood?