Ignacio Escolar, reconocido director de El Diario y hasta ahora firme aliado del sanchismo, ha dado un giro inesperado al romper con el presidente Pedro Sánchez en una editorial explosiva. En un momento crítico para el gobierno de coalición, Escolar no solo ha dejado de respaldar al mandatario, sino que ha lanzado graves acusaciones que podrían hacer estallar la legislatura.
La situación es alarmante: el Partido Socialista se encuentra en modo pánico tras las revelaciones de Escolar, quien vincula a la cúpula del partido con una trama de corrupción que amenaza con desmoronar la estabilidad del gobierno. En su artículo, Escolar denuncia que Santos Cerdán, ex número tres del PSOE, utilizó una sociedad pantalla para cobrar comisiones de empresas como Acciona, lo que ya salpica a altos funcionarios del Ministerio de Transportes.
Un audio comprometedor ha emergido, en el que Coldo García amenaza a Cerdán con desvelar al presidente una grabación que podría tener consecuencias devastadoras. “Si sale todo, explota este país”, advierte una fuente cercana, reflejando la gravedad de la situación. Escolar sugiere incluso una posible financiación ilegal del PSOE, lo que elevaría el escándalo a niveles sin precedentes en la historia democrática de España.
El Tribunal Supremo ha comenzado a investigar las posibles implicaciones de ministros, senadores e incluso del propio Sánchez, lo que intensifica la crisis. Escolar, al romper con el sanchismo, se transforma de cronista a detonante en medio de esta tormenta política, dejando a la Moncloa sin red. La desconfianza y la paranoia se apoderan del PSOE, y la tempestad apenas comienza. La pregunta que todos se hacen ahora es: ¿hasta dónde llegará este escándalo?