**Título: El oscuro secreto de Edith Hermida que podría sellar su destino en la TV**

En un giro inesperado que ha sacudido las redes sociales, Viviana Canosa ha reavivado un escándalo del pasado que involucra a la popular panelista Edith Hermida, y las reacciones no se han hecho esperar. Un video rescatado de años atrás muestra a Hermida, entre risas, confesando un acto que muchos consideran imperdonable: el supuesto abandono de su mascota en una ruta, un momento que hoy resuena con una gravedad alarmante.

El clip, que se emitió en el programa “Bendita”, muestra a Hermida hablando despreocupadamente sobre dejar a un perro a su suerte porque nadie quería adoptarlo. La incomodidad de su compañero Beto Cacela es palpable mientras ella se ríe de la situación. Sin embargo, lo que en su momento pudo parecer un chiste inocente, ha sido reinterpretado por la sensibilidad actual hacia los derechos de los animales, y las redes han estallado en indignación.

La controversia llega en un momento crítico para Hermida, quien ya estaba en el centro de otra polémica tras un cruce con Romina Escalora. La intervención de Canosa, quien ha sido conocida por sus intervenciones provocativas, parece ser un movimiento estratégico que ha encendido el debate sobre la responsabilidad de las figuras públicas. ¿Es un acto de justicia o una vendetta mediática?

Los comentarios en plataformas como Twitter e Instagram son un reflejo de la división que este escándalo ha generado. Algunos defienden a Hermida, argumentando que se trató de un malentendido sacado de contexto, mientras que otros exigen su cancelación inmediata, cuestionando la ética de quienes se ríen de situaciones tan serias.

Mientras tanto, la incertidumbre sobre el futuro de Hermida en la televisión se cierne. ¿Podrá sobrevivir a esta tormenta mediática o será este el final de su carrera? La historia continúa desarrollándose y el tiempo dirá si Edith Hermida podrá salir airosa o si este escándalo marcará su caída en el olvido. Las redes no olvidan, y la presión social podría ser implacable.