Marta González, la emblemática actriz que ha luchado durante 24 años contra el cáncer de mama, se encuentra en una situación desgarradora. En un conmovedor mensaje en redes sociales, la artista anunció que se someterá a una cirugía para extirparle un seno y que, para costear su tratamiento, estaría considerando vender su casa. Esta noticia ha desatado una ola de indignación en las redes: ¿dónde están sus amigas famosas que siempre la han rodeado en las galas y alfombras rojas?
Los rumores, que circulan con fuerza en foros de espectáculo, apuntan a que figuras como Mirta Legrand, Graciela Borges y Susana Giménez, quienes han compartido momentos inolvidables con Marta, brillan por su ausencia en este momento crítico. Según fuentes cercanas a la actriz, ella no ha recibido apoyo concreto de estas celebridades, a pesar de que su hija se ha convertido en su único sostén emocional y financiero.
Marta, visiblemente angustiada, expresó su deseo de no morir en un lugar que no sea su hogar, una frase que resuena con un dramatismo desgarrador ante la posibilidad de tener que vender su vivienda. La comunidad virtual se pregunta: ¿cuánto cuesta realmente una sesión de quimioterapia y una operación de este tipo para quienes tienen millones en sus cuentas? El silencio de sus colegas se siente como un abandono.
Aunque no hay confirmación oficial sobre la venta de su casa ni sobre el contacto de ayuda por parte de sus colegas, la situación de Marta es crítica. Lo que se perfila como un escándalo no es solo su enfermedad, sino la soledad que enfrenta en este momento tan vulnerable. La pregunta persiste: ¿dónde están esos aplausos y homenajes cuando realmente se necesita apoyo? La voz de Marta resuena con fuerza: “El verdadero homenaje es estar, pero estar cuando se lo necesita”.